Es común pensar por parte de muchas empresas que es asumible la tarea de organizar un evento internamente. Y, de hecho, hasta cierto punto es factible. Todo depende de la cantidad de horas y personal que se dedique a esta tarea, el nivel de profesionalidad que se pretenda conseguir y la complejidad del evento. Es decir, si se trata de un simple “picoteo” ocasional en las propias oficinas con bandejas de comida delivery para un grupo de 20 personas, probablemente es gestionable, pero si ya estamos hablando de una cena de Navidad para 300, una convención anual con empleados venidos de diferentes países o un viaje de incentivos en México, probablemente se le pueda ir de las manos fácilmente a la persona que le haya tocado encargarse de semejante hazaña.
Los datos nos indican que a partir de 60 personas cualquier evento eleva su complejidad y es cuando la mayoría de empresas empiezan a requerir los servicios de profesionales.
Creemos que es importante entender qué puede hacer por vosotros una agencia de organización de eventos para poner en valor su función.
Hoy en día incluso las empresas más grandes que disponen de personal de marketing con ciertos conocimientos de organización de eventos, suelen externalizar total o parcialmente esta tarea. En primer lugar, por falta de tiempo. Los departamentos de marketing ya tienen suficientes funciones de las que hacerse cargo, como para añadir a su larga lista la de planificar el congreso internacional o la fiesta de verano.
En segundo lugar, una agencia de eventos dedica muchísimas horas a conocer lo que “se cuece” en el sector. Siempre intentará, o debería, estar al día sobre las últimas tendencias, los nuevos espacios, los proveedores recién llegados, y sobre cualquier información que pueda ser de utilidad para organizar cualquier tipo de evento. No olvidemos que las agencias las forman personas que llevan probablemente años engrosando su agenda de valiosos contactos y dándose a conocer para que incluso las noticias y novedades lleguen a su puerta de forma continua. Cosa que sería imposible alcanzar en unos cuantos días de búsqueda en la red. Esto les permite tener una visión mucho más amplia y especializada de cómo gestionar un evento de la forma más efectiva, creativa y rentable posible. Básicamente, una agencia podrá conseguir, por su alto grado de especialización, lo que seguramente un “planner ocasional” no podrá.
En tercer lugar, la agencia puede dar un servicio integral. El abanico de servicios que puede ofrecer es mucho más amplio de lo que seguramente podría abarcar la empresa cliente, ya que puede encargarse de todo de principio a fin. Incluso de cosas que al cliente ni se le ocurrirían. Por ejemplo, puede encargarse desde la idea y conceptualización del evento hasta las gestiones post-evento, pasando por la comunicación, la producción, el estilismo o la negociación con proveedores. Hay que tener en cuenta que el evento empieza desde que se busca la inspiración para el proyecto hasta que se entrega la última foto del evento al cliente, y en medio hay un sinfín de pasos a seguir que en la mayoría de casos el cliente ni siquiera sabe que existen.
Por otra parte, los profesionales del sector eventos pueden aportar un plus de creatividad que le sería difícil alcanzar al cliente, básicamente porque no puede dedicar el tiempo para nutrirla y para focalizarla en este sentido. La creatividad, en cualquier ámbito, se basa en gran medida en los inputs que buscamos día a día para desarrollar nuestro pensamiento lateral, nuestro imaginario, nuestra red de conexiones de ideas… y esto, junto con la aplicación de técnicas creativas y el propio talento innato, es lo que da lugar a las ideas creativas. De ahí que probablemente las ideas que pueda producir un equipo creativo de una agencia de eventos sean más (en cantidad) y más originales. Simplemente porque pueden dedicar parte de su jornada laboral a enriquecer y desarrollar su pensamiento creativo.
Finalmente, es esencial recordar que, además de la parte creativa, de la planificación previa y del seguimiento posterior, es sumamente importante la coordinación del evento in situ por parte de la agencia de eventos. Esto es lo que permite al cliente poder centrarse en su trabajo y/o en disfrutar del evento, si es que se trata de un evento más de esparcimiento. El equipo directivo o los empleados involucrados en el evento ya tienen suficiente con lo que tengan que exponer, discutir, presentar o disfrutar durante el evento, como para tener que encargarse también de los timings, el servicio de los proveedores o los imprevistos.
Por todas estas razones mencionadas, y seguramente muchas más que podríamos nombrar con un poco más de tiempo, es aconsejable contar con una agencia profesional para vuestros eventos corporativos. Os ahorrará tiempo y dolores de cabeza, y os proporcionará una experiencia más novedosa y disfrutable.
Nomads Events Team